Cada fin de semana Pía Capdevila y su familia se encaminan a esta antigua rectoría del Bajo Ampurdán. Un refugio feliz con el carácter tradicional de la zona que la interiorista reformó a fondo para conseguir una decoración relajante e impecable.
"Es nuestro refugio de paz", así describe la decoradora Pía Capdevila su casa de fin de semana/vacaciones en el Bajo Ampurdán. Un espacio con carácter que invita a largas tertulias, reuniones con amigos y relax, mucho relax.
Pía lleva mucho tiempo inmersa en el mundo de la decoración pero fue en 2008 cuando fundó estudio propio en Barcelona, que ahora ha crecido con el que hace cuatro años abrió también en Mallorca: "Trabajé antes con grandes profesionales que me enseñaron muchísimo, hasta que decidí ir por libre. Empecé sola poco a poco y aprendiendo de mis errores, pero con tenacidad y muchísimas ganas". Le encantan los proyectos residenciales pero su estudio trabaja al cincuenta por cien en viviendas privadas y hostelería.
Cuando descubrió esta casa (de 300 m2), que había sido la antigua rectoría del pueblo "Era una ruina encantadora -comenta-. Tuvimos la oportunidad de que se cruzara en nuestras vidas. Fue un flechazo inmediato. La distribución resultaba perfecta, en este aspecto sólo hice algún pequeño cambio, pero necesitaba una actuación total en cuestión de interiorismo porque todo se encontraba ¡abandonado!. Es una casa antigua de pueblo -continúa-, así que perseguí esa esencia intentando conservar su historia. Quise mantener piezas claves, aunque estuvieran en mal estado, y darles una segunda vida. Me inspiré en mi familia y en lo que realmente necesitábamos: un espacio cómodo, rústico y lleno de encanto".
La mayoría de las piezas formaban parte de su historia y otras las compraron a propósito: "Tenemos desde cuadros que nos pintaron amigos en nuestra boda, hasta alguna reliquia heredada... pero buscamos que cada pieza encajara perfectamente para conseguir el resultado buscado". Hay detalles que han cuidado para respetar su pasado como los grabados en las piedras de la entrada.
Respecto a los materiales, por aquí desfilan los favoritos de la decoradora: "Me gustan los naturales: lino, algodón, fibras, madera...".
En los cuartos de baño se respetaron los techos altos y se dejaron techos vistos con materiales que se pueden apreciar nada más entrar, para conseguir un tono rústico.
Para los dormitorios, tanto el principal como el infantil, se buscaron tonos cálidos y acogedores que no cansan ¡jamás!
El porche es, sin duda, el rincón favorito de Pía: "Aquí paso horas leyendo, trabajando, pensando, con amigos..." y es que esta antigua rectoría se ha convertido, también, en el destino favorito de muchos amigos : "¡La hicimos para esto! ¡Nos encanta invitar! y la tenemos 100% preparada para ello!
Así, la interiorista nos da una de sus recetas favoritas: la Tarta del Obrador de Lara (@elobradordelara)
Se trata de un bizcocho genovés con aroma de vainilla relleno de nata.
Ingredientes: Para el bizcocho: 300 g de huevo, 185 g de harina, 185 g de azúcar, una cucharada de levadura química, aroma de vainilla. Para el relleno y cobertura: nata montada. Para adornar: paniculata, pasiflora, rosa de Pitiminí.
Modo de hacerlo: Engrasar el fondo y laterales de un molde genovés. Mezclar los ingredientes del bizcocho y rellenar el molde. Hornearlo 1/2 h. aprox. a 180ºC en horno precalentado. Comprobar que está hecho con una aguja. Enfriarlo sobre una rejilla.
Cuando esté frío, dividirlo en tres partes. Colocar sobre la fuente de presentación una capa del bizcocho, extender parte de la nata. Cubrir con otra capa de bizcocho, volver a extender nata y terminar con la tercera capa. Extender la nata por todo el bizcocho y rematar con las flores.
© Ediciones Cónica. Todos los derechos reservados.
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